El primer caso de sarampión del año en Bolivia se detectó en una comunidad menonita, dicen las autoridadesEricks Webs DesignEricks Webs Design

El primer caso de sarampión en 2025 en Bolivia se detectó “en una persona proveniente de Rusia” que llegó a Santa Cruz e inició la primera cadena de transmisión en una colonia menonita, dijo el domingo el Ministerio de Salud de Bolivia. Las autoridades calculan que más de 200 colonias tuvieron un estrecho relacionamiento con este primer caso.

Los menonitas forman parte de la familia de iglesias anabaptistas, que surgió en 1525 como el ala radical de la Reforma Protestante en Europa Central.

Desde ese primer caso, la rápida propagación del virus obligó al presidente Luis Arce a declarar la emergencia nacional el martes, para intentar mitigar la velocidad de los contagios.

El segundo caso, que derivó en otra cadena de contagio, también se registró en Santa Cruz, el estado más poblado de Bolivia con al menos 3,1 millones de habitantes (un 27 % del total de habitantes del país). Según autoridades, se trata de una persona “que participó en dos actividades de una iglesia evangélica con más de 30.000 personas de nacionalidad boliviana y extranjera”.

Desde entonces, en poco más de dos meses, la cifra de contagios ha crecido a 60 hasta el 24 de junio.

El Ministerio de Salud informó en las últimas horas el despliegue de 3.600 centros donde los menores de edad pueden ser vacunados.

Por su parte, el Ministerio de Educación anunció este martes un adelanto de las vacaciones escolares en Santa Cruz, capital del departamento que lleva su nombre, desde el 30 de junio hasta el 11 de julio y activó clases a distancia en 10 municipios santacruceños para detener la propagación de la enfermedad.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) considera al sarampión “una enfermedad viral muy contagiosa que afecta sobre todo a los niños” y que, entre sus complicaciones, puede presentar diarrea intensa, infecciones de oído, ceguera, neumonía, encefalitis (inflamación del cerebro) e incluso la muerte.

La OPS señala también que el sarampión sigue siendo una de las principales causas de muerte en niños pequeños a nivel mundial, a pesar de que hay una vacuna segura y eficaz contra el virus. Una vez ocurrido el contagio, no existe ningún tratamiento antiviral específico para combatirla. “En ambientes donde hay malnutrición y falta de atención adecuada, la tasa de mortalidad puede alcanzar hasta un 10 %”, según la OPS.

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